y cada vez que oigo tu voz por telefono y se que no tengo nada que decir me sube por la garganta, me muerde, me duele y me hace colgar. Y luego se regodea y se me deja un vacio dentro, una y tristeza infinita. Solo superada por la rabia que me resta con mal sabor de boca.
No hay comentarios
Publicar un comentario