¿Sabes? El otro día el silencio, me invadió.
De normal, esto no me importa; pero en aquel momento, en medio de la fría y oscura noche, en medio de esa quietud inimaginable, cerré los ojos e intenté imaginar una canción, una simple melodía, un único sonido aunque fuese.
Silencio.
De repente, débil, casi con miedo de romper el equilibrio nocturno sonó un ruido.
Primero me sobresalté; me pregunté cien mil veces en una milésima de segundo que podía ser.
Pum-pum...
Allí estaba otra vez. ¿Quizá había alguien conmigo? Me lleve rápidamente una mano al pecho, un impulso reflejo. Y fue entonces cuando me di cuenta "¡Tonta niña asustada! ¡Era tú corazón lo que sonaba!" Una carcajada solitaria flotó en el aire unos instantes antes de desaparecer, dejándome tan solo su eco imaginario en la garanta. Solitarios también sonaban ahora los latidos de mi corazón.
"Ojala alguien lo acompañase, ojala pudiese escuchar otro corazón que no fuese el mío propio" pensé porque aquel gracioso y animado "Pum-pum" parecía perderse en la inmensidad de la noche sin nada a lo que aferrarse. Ese fue momento nocturno en el que la noche es tan grande que hay monstruos debajo de la cama, en el armario y tras la puerta. Bien sabes que tú solo no puedes, “si tan solo hubiese alguien.”
Y Pensé y seguí pensando... Y apareciste Tú. En medio de mi mente, en medio de la oscuridad.
Simplemente Tú.
Me acurruqué en mi cama, ya dispuesta a dormirme, aun con tu imagen rondándome y colocando una sonrisa entre mis labios; pues ahora lo sabía con certeza. No estaba sola, tenía la perfecta banda sonora, pues sabía que a pesar de la distancia nuestros corazones, unidos, sonaban a la vez.
Latiendo al unísono me dormí, me desperté y aun sigo. Aquí. Siempre acompañada por ti y tu grácil y callado "Pum-pum…" al unísono del mío.
"Due cuori che battono all'unisono, io e te, sognare in lontananza. Semplicemente tu. La mia colonna sonora perfetta."
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